T
engo un alumno de doce años al
que le raciono las preguntas por sesión hasta un máximo de dos. De otro modo
gastaría mis 50 minutos indocentes vomitando obviedades en lugar de someros
brochazos de conocimiento. Mi estimado Jaime siempre protesta, escaso de
convicción, con las mismas palabras del título.
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiWGu7TfGwUYBeeBLgcen2tI9msi7qYXNeeYvH3IFQ9LDBJC0wgM6eXkmsaurxSG2AbBZHvmZaAKwj89qRA8fvckFbWjTpyszwRaTKrm6XTk_wUT9DDm2SVNi5Hgtuk5jxdn5HyFY-1nE2m/s1600/g2.jpg)
Valga tan traído prolegómeno para
denunciar un timo de los de verdad: pagas 13 euros, pierdes dos horas y te
quedas con la sensación de ser gilipollas perdido. No, no me refiero a ver la
última de Almodóvar con menú de palomitas. Que podría ser, pero para ello no
hace falta irse al Guggenheim, que en definitiva es el crimen que nos ocupa hoy.
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhWWElGn6aUL4AEYHH_JeeB9Kfp89fqpfNGfBP-aWzYBdqjaDicNUX3_-uIsU54HosNJb3pDDNQ1kIHFqLiorJLUCLobsvjLWXN4wRJb6KQ2oO1HecMXVuc-hMvCa8QTyOS610z2JYhpfZe/s200/mm.jpg)
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiUufL0t2uQzBz65gmwXSKPMNwx1IEE5W0R-_WKuNM2S6065s3kTv5-bRCd3PCxnKIxXZi18vYA1jos0DCjfRcDUr4cD6CsFUoeoVHGmAa8NO_PICSiu1Djgc4mYs_UDHqyqFeXPDtTwrO2/s200/ijiji.jpg)
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhGXx9ik7XNqWIRAf6zPqewPdWo5VrRLKgudXD09HVW9lIvHLa6ZbyfCmgaaaAcosI6kU8_EeIYYY00RVvGNWncmzfNvCRlx-cxABdC8Qz7pzBxeN6QAJbUlTA4sOZYrVlGE4BqL0ATM1qE/s200/sper.jpg)
Yo debo ser un inútil integral,
limitado, analfabeto, burdo e insensible. Puedo prometerles que miré todos y
cada uno de aquellos cuadros, esculturas y bocetos.
Hasta me sometí a la odiosa
audioguía que sólo vale para justificar la entrada prohibitiva y la encendí
media docena de veces, sólo para reafirmarme en mis vulgares impresiones sobre
las obras incomprendidas. Los análisis audioguiados no podrían adornar más las
piezas, pero no por eso tendrán más valor. Yo también soy capaz de clavar
cuatro trazos desagradables y pretender que es una alegoría del sufrimiento
humano. Desde luego que lo será para el que mire mi obra maestra.
No me importa
qué iluminados críticos de arte han dado el visto bueno a semejante colección
de chapuzas ni cuánto deseaban tirarse a la hija del artista, les puedo
asegurar que, para el hombre vulgar, tosco, provinciano y terrenal, aquello no
respondía a ningún paradigma artístico. Ni los colores, ni la composición, la
armonía, la proporción, la estética, la funcionalidad, las sensaciones, los
detalles, la estructura, la evocación… nada en la gran mayoría de las obras
discriminaba la genialidad de la bazofia.
Sólo en ocasiones la mediocridad
salvaba levemente el conjunto, y en mínimas excepciones la pieza transmitía
algo, hacía pensar o simplemente gustaba. Ya sé que cualquier iniciado al arte
leería estas líneas y me haría ahorcar, pero créanme, señores importantes, para
hacer justicia les iba a faltar soga. En el momento que lo artístico se
divorcia de la cultura pop ya no es nada, sólo genialidades de incomprendidos
para incomprensibles como ustedes. Para los mundanos, pónganos arte de botellón
y artistas de aplauso fácil. Dónde va a parar.
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgottpIuiydVud2EXY4MAmL3_lZvQfBKX85ksIbY0xTgstJMNGdDdd1YfAV4QQKz4vpI84MVx01PA75TOL_Uzml7SS_RGn3rQ9XFhSvCmyXnMG7JSsoWlDkeIndwvbsVWdSY0Q0K4LzPrnD/s200/fbz.jpg)
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgpww58ITCIg7onIErxLB5T1KJFogHeqDK0DsNgGNgd34G7g7BRAP0eOnaVpiVIQW6zVUPCsTQFCWe8De2ygxOGL-ASrccvoC7_GU-2xcLVxll6YdN7Kldn_zGJWAFDuy5oZfWNYizMuBbR/s200/guggie.jpg)
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjJ-kasBLuu6cHQz3Vawakw4L1MAiFph0b6E5ZeU5c4_bBV6d8wvaGpz_cro0GudfwLRfQTQxJX0hDbbvEBL85acwrZYa5-cW_Qvtd42eL8ihmAJ06llWw3Lp9ucnN5L2K92oeoyQ9iANIh/s1600/ls.jpg)
No he estado nunca dentro, aunque por fuera lo he visto muchas veces. A mi me recuerda al pabellón puente, que es muy bonito en su visión exterior, pero que lo de dentro nadie sabe muy bien para qué sirve ya demás cuesta un huevo mantenerlo. Pero por lo menos, y al fin y al cabo, esto es un museo.
ResponderEliminarNunca fuí, pero me gustaría. Aunque sí creo que al arte debe ser comunicación, y si falla eso...poco hay.
ResponderEliminarPero como siempre, el discurso explicativo, el relato sustituyen lo relevante. Y ay del que diga que el emperador está desnudo...
Me gusta mucho cómo está escrito este artículo y también el contenido, por supuesto. Estoy de acuerdo, a mi el Guggenheim me impresiono pero por la estafa que me pareció.... Me hace mucha gracia eso de racionalizar las preguntas de tu alumno...¿Pesadico o qué?
ResponderEliminarLa primera vez que fui al museo de la ciencia Príncipe Felipe de Valencia, que ya tiene huevos el nombre, me impresionó el continente, pero el contenido era una estafa. Años después volví y la cosa había cambiado, aunque aún puede mejorar mucho. Espero que a la próxima vez que vaya el contenido sea de verdad atractivo.
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