Pasar por una puerta al mundo nunca es igual cuando se repite el umbral de
la experiencia. La inocencia da valor a las cosas. Venecia nunca gusta lo mismo
la segunda vez, del mismo modo que la película que tanto nos impactó nos sabe
menos intensa cuando la volvemos a visionar. Si al amargo desencanto de viajar
al mismo paraíso, leer otra vez aquel libro, visitar ese museo, subir al
cachivache imposible de antaño, jugar a ese juego divertidísimo o practicar
aquel deporte tan molón le añadimos un componente de niñez el desencanto será
ya de matrícula, porque nada impresiona más que ver las cosas cuando uno no
levanta un palmo del suelo.
Si eres niño El llanero solitario te parecerá una
película mítica y la cueva del horror la experiencia más terrorífica por la que
hayas pasado nunca; tu padre lo sabrá todo y tu madre será la más guapa; el
parque de atracciones será el lugar más alucinante del mundo y los videojuegos
el vicio mejor inventado jamás. Recuperar todo aquello de mayor es un cóctel
mal combinado de decepción y jocosidad. ¿Cómo podía gustarme semejante bodrio?
Y yo que perdía el culo por esa cantante…
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Tienes mucha razón.
ResponderEliminarSí, cuando vuelvo al pueblo, veo todo más pequeño y normal. Y lo sigo recordando con un cariño especial que no quiero perder. Maldita memoria...
ResponderEliminarUn abrazo :)
Es cierto Dry que la inocencia da valor a las cosas. Hay que estrenar mas. Estrenar ropa, estrenar viajes, estrenar películas y a poder ser estrenar amores. Es la forma de seguir sorprendiéndonos, y la sorpresa es la salsa de la vida. ¿no?
ResponderEliminarAuf Wiedersehen Dry, ves! me he sorprendido despidiéndome en alemán. (Significa Adiós) ya me encuentro mejor. :-)
Efectivamente, la experiencia te va enseñando que cuando vuelves a un lugar que habías visitado hace pongamos veinte años, las cosas ya no son como estaban y las contemplaste en su momento. El llamado progreso, que naturalmente ha traído cosas buenas ha terminado con otras, que nos parecían más auténticas. La eterna polémica del paso del tiempo en el entorno, en el paisaje, en suma, en lo que conocíamos y ya nunca será igual.
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