viernes, 3 de agosto de 2012

Éxodo urbano

Soy un hedonista de la psique bajo los efectos de las sustancias y sus revelaciones oníricas y alucinatorias. Vivo en un mundo que trasciende las convenciones de éste.
Lo dejo. Estoy harto. Me sale mucho más caro, pero me apetece de veras dejar la ciudad e ir a vivir al campo, como hacen todos los seres humanos. No me entiendan mal, la urbe tiene sus ventajas: comercios, cines, supermercados, farmacias, concesionarios, instituciones, colegios, gasolineras… pero una cosa es eso y otra ya quedarse a pernoctar entre sus desiertas calles de asfalto. Por el día son templos bullentes de actividad y burocracia, mas a la noche se tornan en fríos cementerios de hormigón. Cierto que la vivienda es más barata por eso de ser metropolitana, pero lo que de verdad merece la pena es trasladarse al pueblo, lleno de alegría, voces, gente paseando por las cañadas, vacas rumiando y tractores nocturnos. Donde yo vivo la gente ha emigrado al campo, y no quieren saber nada de unos núcleos urbanos llenos de limitaciones. Lo malo que a veces los pueblos se habitan tanto que le acaban transformando en nuevas ciudades, y a los pocos años las abandonan de nuevo. Menos mal que aún quedan burgos y villas de cuatro casas e infinitas posibilidades.

2 comentarios:

  1. Buena idea, hazlo antes de que todos la tengan. Pero sabe que echarás de menos lo que ahora detestas, probablemente ;)

    Un saludo :)

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  2. Joder Dry, que decisión más drástica. ¿Seguro que no te arrepentirás? Desde luego yo tengo un par de amigos que hicieron lo mismo y dicen que son felices,..pero,..hummm, no se, cada vez que vienen se comen Zarautz y Donosti..me da que echan en falta algo. Suerte en tu decisión,..ya nos contaras.

    Abrazos!!

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